Zapatillas
de Ballet
Las zapatillas
de ballet son zapatillas ligeras que están diseñadas
específicamente para la práctica del ballet. Los
zapatos de ballet pueden tener suela partida (para aumentar la
flexibilidad) o suela completa y típicamente se encuentran disponibles en rosa,
negro, gris o blanco. Tradicionalmente, las mujeres los llevan rosados y los
hombres blancos, mientras que los colores carne o marrones que dan la
apariencia de bailar descalzo son llevados tanto por hombres como por mujeres y
pueden ser:
·
Las zapatillas
de cuero: son duraderas y ayudan a mantener los pies
calientes. Los altos zapatos de cuero de grano son típicamente los más cómodos
y también los más costosos.
·
Las zapatillas de lona: son llevadas típicamente
por los hombres. Cuestan menos que los zapatos de ballet de cuero y la lona
permite que el pie respire, pero se gastan más rápidamente que los
de cuero.
·
Las zapatillas de
satén: son llevados típicamente por las mujeres. Se tiñen
fácilmente para modificar el color de la zapatilla para ocasiones particulares.
Las
bandas elásticas se utilizan para ayudar a asegurar los zapatos de ballet a
los pies. Cada zapato se puede asegurar bien con una sola banda a través del
arco del pie o con dos bandas que se crucen en forma de “X” en la tapa del
arco. Las zapatillas de suela partida emplean típicamente dos bandas, mientras
que los de suela completa generalmente apenas tienen una. En el caso de bandas
únicas, la mayoría de los fabricantes de zapatillas de ballet atan
las bandas a los zapatos durante el proceso de fabricación. En el caso de los
zapatos de doble banda, los fabricantes atarán típicamente un extremo de cada
banda al zapato y dejarán al comprador atar los extremos libres de las bandas
para realizar un ajuste óptimo.
Zapatilla de
Media Punta: Son las zapatillas usadas para la preparación a las
puntas del ballet, es decir, para las personas que están iniciando, para
los principiantes y para las niñas o niños. Con ellas el pie se adapta mientras
comenzamos a adquirir fuerza y flexibilidad en los mismos. Al principio, suelen
sentirse un poco ajustadas o talladas al pie como una media, pero después que
nos acostumbramos resultan ser bastante cómodas para practicar cualquier
ejercicio. Están hechas de tela bastante suave y NO sirven para pararse en puntas; están diseñadas única y
exclusivamente para adaptar el pie y usualmente se deben utilizar por un
período de 3 a 4 años antes de las puntas.
Zapatillas de
Punta: Son zapatillas fabricadas en
diferentes tipos de materiales como el cuero o el satén y normalmente llevan un
soporte interno de yeso o madera para que permita a la bailarina realizar el
balance en la punta de los pies, a diferencia de las zapatillas de media punta.
Después de que el pie ya se ha adaptado y ha adquirido la fuerza necesaria,
entonces se comienza con el uso de las puntas de ballet. El proceso de
adaptación las primeras veces que se utilizan las puntas es algo fuerte y
hasta se podría decir doloroso para las bailarinas; una vez que se ha adquirido
la técnica correcta ya suele convertirse en algo habitual para ellas, además de
que las zapatillas ya se han amoldado completamente a sus pies. Es importante
recalcar que cuando se van a
utilizar las puntas por primera vez hay que evitar hacer esto sin la
supervisión del profesor capacitado para ello, ya que esto podría traer graves consecuencias para la
joven, tanto como lastimarse el pie hasta doblarse el tobillo, etc. Existe hoy
día diversas variedades de puntas y marcas, la mejor es la que se adapte
perfectamente a tu pie y no lo maltrate ni lo lastime, al contrario, te permita
realizar un buen balance. El objetivo de las zapatillas de puntas es
proporcionar una apariencia ligera y estilizada de la bailarina durante la
representación, que parezca levitar sobre el suelo o que no haga ruido al caer
tras un salto.
Su origen se remonta al nacimiento de los ballets románticos en el siglo XIX. Se
considera que una de las primeras bailarinas en emplear este tipo de zapatillas
fue Marie Taglioni en el ballet La sílfide en
1832 utilizando la técnica de puntas. En un principio, las bailarinas
introducían algodón para reforzar la punta mientras que en la
actualidad la zapatilla cuenta con una estructura rígida en la que se apoyan
los dedos.
Las zapatillas de puntas no se utilizan hasta el
segundo o tercer año de enseñanza. En los ensayos, se emplean al final de los
ejercicios de barra y su uso es progresivo para reforzar los músculos del pie y
adquirir el equilibrio necesario para posarse sobre ellas. Existen zapatillas
con diferente nivel de rigidez en su suela. La elección de una u otra dependerá
de la bailarina en función del grado de fortaleza de su pie.